Damasco, Siria, a 25 de octubre de 2024.- Luego del ataque terrorista en Ankara, el gobierno turco tomó represalias y bombardeó el norte y este de Siria, lo que dejó casi 30 civiles muertos, según reportó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
En total, Turquía lanzó 45 ataques con drones en las regiones fronterizas sirias, según señaló la OSDH en un comunicado, el cual añade que las tropas turcas bombardearon panaderías, centrales eléctricas, instalaciones petroleras y puntos de control.
La OSDH dispone de una amplia red de fuentes de información en Siria, país atacado porque tiene lugares presuntamente usados por los kurdos para operar. La operación ha elevado la tensión en Medio Oriente.
La cuestión es que el ataque perpetrado el miércoles en Ankara, capital turca, fue atribuido al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), ilegal en Turquía. Fueron dos milicianos que llegaron fuertemente armados y abrieron fuego en oficinas de gobierno, el saldo fue de cinco muertos y más de 20 heridos.