Tucson, Arizona, Estados Unidos, a 13 de abril 2024.- La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris culpó al ex presidente, Donald Trump, del restablecimiento en Arizona, de una ley del de 1864 que prohíbe prácticamente en cualquier circunstancia la interrupción del embarazo.
“En estados a través de todo el país, extremistas han propuesto y aprobado leyes que criminalizan a doctores y penalizan a mujeres. Leyes que amenazan a doctores y enfermeras con cárcel solo por dar cuidado médico (a mujeres que buscan el aborto)”, dijo Harris, en un evento en Tucson, Arizona.
La vicepresidenta comentó que leyes “extremas” como la que se intenta revivir en Arizona, que data de la época de la Guerra Civil y que prohibiría prácticamente por completo el aborto y ni siquiera exceptúa los casos de violación o incesto, son un peligro para la vida y derechos reproductivos de las mujeres.
La única excepción contemplada en dicha ley es cuando la vida de la madre se ve en riesgo.
Harris indicó que la prohibición del aborto en Arizona es una consecuencia más de lo que califico como la “devastadora” decisión de la Suprema Corte de los Estados Unidos, -de mayoría conservadora-, de terminar con las protección establecidas por el caso de Roe vs. Wade.