Morelia, Mich., a 13 de febrero de 2023.- Michoacán es el estado mexicano con más minas sembradas en su territorio, con casi mil artefactos desactivados, pero otros tantos han estallado, causando muertes y mutilaciones a sus víctimas, que son principalmente militares y agricultores.
En su lucha por el control del territorio, los cárteles michoacanos se han vuelto cada más sofisticados, violentos e intransigentes, llegado al grado de sembrar minas en caminos y huertas, para protegerse de la incursión de enemigos, tanto de cárteles rivales como de las fuerzas de la ley.
El primer incidente registrado en Michoacán tuvo lugar el 31 de enero de 2022, cuando un vehículo blindado del Ejército activó una mina terrestre en un camino de Tepalcatepec que lleva a Aguililla.
La explosión ocurrió cerca de las 10:30 horas en un camino cercano a la comunidad Loma Blanca, resultando herido el conductor de la unidad blindada.
Dos semanas después, en Aguililla, un hombre y su hijo que regresaban a la comunidad El Naranjo de Chila para revisar sus huertas luego de tener que abandonarlas por la violencia, activaron una mina cuando se desplazaban en su camioneta por un camino de terracería.
El estallido cobró la vida del padre y milagrosamente sobrevivió el hijo.
Los informes militares revelaron que en esa región de Michoacán, el crimen organizado había sembrado cientos de minas, por lo que se implementó un megaoperativo federal para el desminado.
Tras la desactivación de cientos de artefactos en al menos seis municipios y luego de un año sin incidentes, una nueva explosión cimbró al Ejército.
El 19 de junio de 2023, en Apatzingán, 8 soldados resultaron heridos por la explosión de un artefacto sembrado en un camino de terracería; cuatro de los heridos presentaban heridas que ponían en riesgo sus extremidades y sus vidas.
A mediados de 2023 se reportaba que 881 artefactos habían sido desactivados en Michoacán, 168 de ellos en Aguililla, 118 en Tepalcatepec, 115 en Apatzingán, 95 en Buenavista, 91 en Marcos Castellanos y 53 en Coalcomán.
“Tras el intento de López Obrador por retomar pueblos fantasmas de Michoacán vemos el uso por primera vez de minas terrestres y artefactos explosivos improvisados que hacen uso de munición de mortero y hasta C4. Esto es otra cosa que me sorprende y se me hace difícil creerlo”, escribió al respecto Emilio Cosgaya Rodríguez, Coronel de Infantería Diplomado de Estado Mayor.
Las explosiones de minas continúan en toda la entidad, pero muchas de ellas no se documentan. Así ocurrió a inicios de enero de 2024 con la mina que le quitó la vida a Daniel Sierra Santana, alias "El Chaco", uno de los máximos líderes del crimen organizado en Michoacán, quien falleció por la explosión de un artefacto en el municipio de Tumbiscatío.
El pasado miércoles 7 de febrero, una mina estalló en la comunidad El Atuto, municipio de Gabriel Zamora, matando a un jornalero e hiriendo a otro.
