Baja California Sur, 11 de marzo de 2024.- El anestesiólogo Gustavo Darwin “A”, fue sentenciado luego de haberse declarado penalmente responsable de delitos contra la salud.
Durante una audiencia de procedimiento abreviado, Gustavo “A” aceptó su responsabilidad penal en el delito mencionado y, de forma inicial, el juez dictó una sentencia condenatoria de cuatro años de prisión, pero al declararse penalmente responsable, el juzgado le otorgó beneficios para que cumpla su sentencia a través de jornadas de trabajo comunitario, así como una multa económica.
En 2023, el médico había pedido un cargamento de ampolletas de fentanilo a una farmacia de Guadalajara, Jalisco, por lo que se le acusó de delitos contra la salud, en su modalidad de posesión de morfina, efedrina y delta-9-tetrahidrocannabidol (THC), con fines de suministro.
Dicho paquee llegó al Puerto de Pichilingue, en Baja California Sur, y luego fue entregado a la casa de Gustavo, en la colonia El Tezal de Cabo San Lucas.
Posteriormente, se llevó a cabo una orden de cateo en la vivienda del anestesiólogo por parte de autoridades federales, en donde encontraron 27 ampolletas con fentanilo, una con morfina, tres con efedrina y un frasco con THC.
A pesar de que Gustavo Darwin sostuvo inicialmente que contaba con un permiso de la Comisión Federal para la protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), que avalaba la transacción, más tarde la FGR confirmó que no contaba con dicha autorización.
De acuerdo con la investigación, Gustavo Darwin intentó tramitar su autorización para prescribir medicamentes que requieren recetario especial, tal como el fentanilo, solicitud que fue rechazada por las autoridades sanitarias.
Además, personal del hospital en el que el anestesiólogo dijo trabajar, explicó que medicamentos como el fentanilo, una vez que se solicitan, son proporcionados por el mismo hospital a través de una farmacia intrahospitalaria.