Los Reyes, Mich., a 3 de enero de 2024.- Dos grupos rivales de la delincuencia organizada continúan en una encarnizada lucha por el control territorial en los límites de Michoacán con Jalisco, usando camiones blindados, drones que arrojan explosivos, morteros y armas de los más altos calibres, mientras los tres niveles de Gobierno guardan absoluto silencio.
Desde las últimas semanas del pasado mes de diciembre, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) lanzó una ofensiva en el poniente de Michoacán, en el territorio que controla el “Cártel de Los Reyes”, brazo armado en el Valle de Zamora, para el cártel de Los Viagras.
La ofensiva de Jalisco incluyó el despliegue de la ametralladora multicañón M134 Minigun, capaz de disparar miles de balas por minuto, además de armar a sus sicarios con el rifle Barrett calibre 50, drones cargados con explosivos, morteros y camiones blindados.
La resistencia michoacana del grupo que encabeza Luis Enrique Barragán Chávez, alias "El R-5" o "Güicho de los Reyes", pelea con rifles de grueso calibre, incluidas ametralladoras automáticas y el Barrett calibre 50, así como camiones blindados, entre estos últimos un TPV Sandcat, valuados en alrededor de 5 millones de pesos y usado por las Fuerzas Armadas mexicanas, fiscalías y policías estatales, para operativos de alta peligrosidad.
A través de las redes sociales, los sicarios de ambos bandos han presumido la quema de campamentos y vehículos, la muerte de rivales, ataques aéreos, balaceras y movilización de convoyes, sin que alguna autoridad se haya expresado al respecto, dejando en total abandono a los pobladores de esa región del estado.
